“Al ser humano pertenece la risa como el llanto, la broma interpretada o narrada, la tensión relajada, el chiste, el buen humor, la burla sobre lo inesperado o imprevisto que le cae del cielo como un regalo. No se podrá decir que sólo la tragedia abre la mirada a la trascendencia mientras la comedia se mantiene en el campo de lo relativo, de lo subjetivo y de las ilusiones de la inmanencia. Precisamente el enraizamiento de lo cómico en el “pueblo” manifiesta con claridad que la comedia no se alimenta sólo de lo vital grosero, sino de una gracia natural.
Esta cualidad permite y justifica lo cómico: donde se le acepta en su inmediatez es una aproximación al impenetrable sentido de la totalidad tan legítima como lo trágico; uno y otro tienen su lugar, uno junto a otro pero sin mezclarse, y desbordaría las atribuciones del hombre intentar que uno se suprima en el otro o que ambos coincidan.”
Si te gustó este artículo, ¡considera compartirlo!
© 2012-2023 Fundación Maior. Todos los derechos reservados
El sitio web www.maior.es utiliza cookies propias y de terceros para recopilar información que ayuda a optimizar su experiencia de usuario. No se utilizan las cookies para recoger información de carácter personal. Encontrará más información en nuestra Política de cookies, pinche el enlace para más información.
ACEPTAR