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Julio César
Julio César, dirigida por Paco Azorín, en el Teatro Bellas Artes de Madrid. Con un vestuario y un cuidado del texto que acercan a nosotros el significado la obra de Shakespeare, vemos en esta representación la nobleza que su autor imprime a cada uno de los personajes, aun siendo todos tan distintos entre sí; pero también la consecuencia que sobre él, y sobre los demás, tiene escuchar al espíritu de la mentira. Pero desde el trasfondo en que se sitúa Shakespeare se revela que, paradójicamente, las malas acciones de los hombres no son un lugar sin salida, al contrario, el designio de los dioses actúa sobre ellas transformando la mayor miseria del ser humano en su mayor grandeza. Porque si al principio de la historia parece noble quien es romano y como tal se comporta, sólo cuando concluya la guerra y Roma aparezca cubierta de caos, se dudará de esa nobleza, y Marco Antonio, ante el cadáver de Bruto, su enemigo, le honrará diciendo sólo: “Éste fue un hombre”.
Agradecemos esta puesta en escena, deseando que no concluya en Madrid su gira.
